Hacer accesible lo que comunicamos

La palabra accesibilidad suele asociarse con rampas, señalizaciones claras o diseños arquitectónicos pensados para la discapacidad. Sin embargo, este concepto va mucho más allá. En este artículo, exploramos la accesibilidad desde un ámbito que a menudo se pasa por alto: las comunicaciones.

La primera vez que tomé conciencia del impacto de este término fue en un diplomado sobre Comunicación y Derechos Humanos. Ahí comprendí que la accesibilidad en el ámbito de la información no es un simple detalle técnico: es una forma concreta de respeto e integración. De hecho, el Manual de Accesibilidad del INDH plantea que la accesibilidad comunicacional es un derecho y una condición indispensable para la inclusión plena.

La accesibilidad comunicacional busca garantizar que todas las personas, independientemente de su condición sensorial, cognitiva o lingüística, puedan recibir, comprender y emitir información. Por ejemplo, si preparamos una diapositiva con texto muy pequeño, bajo contraste o exceso de información, estamos excluyendo a quienes tienen baja visión, dislexia o dificultades de atención. Lo mismo ocurre cuando diseñamos una web sin textos alternativos o un video sin subtítulos o transcripción: el mensaje simplemente no llega a todos y todas.

Hacer accesible lo que comunicamos es una forma concreta de construir igualdad, pues avanzar en esto reduce la carga cognitiva que algunas personas enfrentan al procesar información, y hacerlo es, en esencia, un acto de justicia. No hay inclusión posible si el mensaje no llega a todas las personas.

Un buen punto de partida es incorporar la accesibilidad desde el inicio de cualquier proceso comunicativo, no al final (como suele hacerse). Si te toca dar charlas, clases o ponencias, considera que siempre puede haber alguien que requiera una presentación accesible. La mejor decisión es partir de la base de que siempre será así.

Recomendaciones para una comunicación más accesible

• Define una idea fuerza por diapositiva y una idea central para toda la charla

• Incluye títulos descriptivos que orienten la lectura y mejoren la comprensión

• Usa tamaño de letra sobre 24 y para los títulos sobre 32 puntos

• Evita el exceso de texto. Aplica la regla del 6x6 (máximo seis líneas de seis palabras)

• Alinea el texto a la izquierda para facilitar el seguimiento visual

• Prefiere fuentes simples y legibles como Arial, Verdana o Tahoma

• No uses solo el color para transmitir significado, añade formas o texto complementario

• Asegura un alto contraste entre texto y fondo

• Redacta enlaces con palabras clave al inicio de la frase

• Elige imágenes con propósito y agrega texto alternativo (alt text)

• Si incluyes videos considera que estos cuenten con subtítulos o transcripciones

• Verifica el orden de lectura en tus diapositivas para lectores de pantalla

En Tomar la Palabra creemos que comunicar de forma accesible es una práctica democrática: garantiza que todas las personas —sin importar su contexto o condición— puedan comprender, participar y contribuir.

En nuestras mentorías, talleres y capacitaciones abordamos estrategias para hacer la comunicación más clara, inclusiva y accesible. Si te interesa sumarte a este desafío, contáctanos.